
Días previos al festejo del Dia de las Madres en México, diversos colectivos de Madres Buscadoras convocaron a una marcha para hacer presentes sus demandas y seguir visibilizando una realidad que aqueja a todos los sectores de la población, pero que por la propia naturaleza de la problemática atenta de forma directa contra las madres. Una situación como la desaparición forzada sigue creciendo en el país, y las madres intentan resistir para conseguir avances satisfactorios en sus búsquedas y otras actividades legales.
Adicionales a las peticiones que año con año se mantienen para intentar mejorar sus condiciones de vida, y las de la población, en esta ocasión se sumaron puntos para tratar de luchar contra la criminalización, el acoso y la violencia que diariamente se desata en su contra por ejercer labores de búsqueda, denuncia y acompañamiento. Con consignas como: “10 de Mayo no es de fiesta, es de lucha y de protesta” y “¿Dónde están?, ¿Dónde están?, ¿nuestros hijos dónde están?”, madres y familiares, recorrieron avenida Paseo de la Reforma desde el Monumento a la Madre hasta la glorieta del Ángel de la Independencia.
Este año el lema de la manifestación fue “Las madres llegarán a la verdad”, y aunque el foco central se le dio a las madres víctimas de la desaparición de alguno de sus hijos o familiares, otras organizaciones sociales se integraron a la marcha para impulsar su magnitud. Durante la manifestación se señaló la indiferencia y poca empatía de todos los niveles de gobierno frente a los acontecimientos, y criticaron el actuar de las autoridades para permear en el avance del Crimen Organizado, al mismo tiempo que estigmatizan al movimiento.
Entre los discursos se destaca el respaldo existente por parte de los colectivos hacia la decisión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de activar el Artículo 34 de la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas. Se argumenta que México ha sido sobrepasado y es necesaria la ayuda de la comunidad internacional para resolver la crisis de violencia y desapariciones en el territorio.

También criticaron la “simulación de trabajos” por parte de las autoridades, ya que a pesar de que se han impulsado reformas, leyes y la creación de protocolos para atender la problemática, esta no ha mejorado y no se han logrado mayores avances en la materia. Se remarcó la falta de voluntad política para reformar a las fiscalías y las comisiones de búsqueda, siendo estas instituciones clave para obtener resultados. Haciendo hincapié en que gran parte de las iniciativas no han salido a terreno y solo se enfocan en un esfuerzo burocrático.
Las manifestantes se refirieron a la presidenta Claudia Sheimbaum, advirtieron que ya no se dejarían engañar por compromisos vacíos y acciones echadas al aire. Al mismo tiempo, exigieron que se respetara el dolor que vivían diariamente y la lucha que a pesar de las adversidades siguen consagrando. Como propuesta final, pidieron se implemente un mecanismo independiente e internacional para ejercer acciones de búsqueda e investigación en el país. Y llamaron al Secretario General de la ONU para intervenir en pro de la población.
Esta manifestación mostró una realidad cruda que vive México, y puso sobre la mesa de análisis las distintas cotidianidades de la población. Aunque un dia como el 10 de Mayo debería de centrarse en la celebración y gratitud hacia las madres, este momento mostró las inclemencias que muchas soportan día con día. Además, mostró la inacción e indiferencia del gobierno ante las demandas, incluso invisibilizando estos movimientos legítimos.
– Créditos a imagen destacada: Contra Réplica / EdgarCortezm –